MÁXIMAS DE DON BOSCO
- ALEGRÍA
1 Para nosotros la base de toda santidad consiste en estar siempre alegres. (VI, 356).
2 Alegría, estudio y piedad: es el mejor programa para hacerte feliz y que más beneficiará tu alma. (VII, 494).
3 Muéstrate siempre alegre, pero que tu sonrisa sea sincera. (VI, 697).
4 Para ser bueno basta practicar tres cosas y todo te resultará a pedir de boca. ¿Cuáles son estas tres cosas?: Alegría, estudio y piedad. (VII, 494).
5 ¡Mi mayor satisfacción es verte alegre!. (IX, 627).
6 Estando siempre alegres, ni cuenta nos daremos qué pronto pasa el tiempo (I, 374).
- ALMA
1. Tus pensamientos, palabras y obras, todo ha de convertirse en beneficio de tu alma. (VI, 442).
2. ¡Hijo!, tienes una sola alma; es preciso que la salves. (III, 608).
3. Si yo sintiese tanta solicitud por el bien de mi alma, como la tengo por el bien del alma de otros, estaría seguro de salvarme. Con gusto sacrificaría todo, con tal de poder ganar el corazón de los jóvenes y ofrecérselos al Señor. (II, 250).
4.No pienses que vives en el mundo únicamente para divertirte, enriquecerte, comer, beber y dormir, como los animales privados de razón; pues el fin para el que has sido creado es infinitamente superior y más sublime; esto es: amar y servir a Dios en esta vida y salvar tu alma en la otra. (BAC, 686).
5. Tengo una alma sola: si la pierdo, ¿de qué me servirá haber vivido?. (IV, 55).
6. La mejor obra que se puede hacer en este mundo es atraer las almas perdidas al buen sendero, a la virtud. (I, 475).
- AMISTAD
1. La dulzura en el hablar, en el obrar y en reprender, lo gana todo y a todos. (IV, 93).
2. Sin sonrisa no es posible demostrar amistad. (XVII, 108).
3. ¡Cuántas almas se pueden atraer con el buen ejemplo!. (IX, 348).
4. El que regala un libro bueno, aunque no tuviera más mérito que haber suscitado un buen pensamiento, ya ha ganado un mérito incomparable delante de Dios. (II, 375).
5. Si alguno se inclina hacia las amistades particulares, o que, aún remotamente, corra peligro en la moralidad, cámbialo prudentemente de sitio; si fuera necesario, dale otra ocupación; y si pusiera en peligro la inocencia de algún compañero o de algún alumno, destínalo a otra ocupación y da aviso oportunamente. (VII, 525).
6. No os fiéis de la amistad de los que hablan mal de sus superiores o que tratan de alejaros de vuestros deberes. (III, 167).
7. Quien da o escucha malos consejos, está ciego y se hace esclavo del demonio. (IX, 34).
- AMOR
1. Sin amor, es inútil cualquier sacrificio del educador. (V, 544).
2. (Una de las últimas frases de Don Bosco a Don Rúa). "Que te amen". (XVIII, 537).
3. Para poder ser amado hay que demostrar primero que se ama. (XVII, 111).
4. No basta amar a los niños, es preciso que ellos se den cuenta que son amados. (XVIII, 30).
5.Sin cariño, resulta estéril toda educación. (VIII, 752). 4
6. No todos pueden ayunar emprender viajes largos; no todos pueden dar grandes limosnas, pero todos pueden amar a Dios; basta quererlo. (V, 566).
7. A Dios no le placen las cosas hechas por la fuerza. Siendo Él, el Dios del amor, quiere que todo se haga por amor. (VI, 15).
8. Para que el amor fraterno sea realmente verdadero, debe ser tal que el bien de uno sea para el bien de todos, y el mal de uno lo sientan todos. (XII, 630).
9. Los jóvenes ... se muestran muy dóciles cuando están convencidos de que la persona que les manda los ama. (XVII, 108).
- AUTORIDAD
1. La Congregación tiene como fin especial sostener la autoridad de la Santa Sede, doquiera que se encuentre y dondequiera que trabaje. (XVIII, 487).
2. Recomendamos siempre la obediencia a la autoridad civil, porque quien gobierna está puesto por Dios para mandar. (II, 450).
3. Respetad todas las autoridades constituidas como ciudadanos, pero como católicos depended del Sumo Pontífice. (IX, 417).
4. La religión Católica es el fundamento de la prosperidad en los estados, porque los súbditos no serán fieles a la autoridad civil si no son fieles primero a Dios. (IX, 443).
5. Mi mejor consejo es éste: examinar de un modo práctico cómo dar al César lo que es del César, para que al mismo tiempo se dé a Dios lo que pertenece a Dios. (XIII, 288).
6. Cuando surja alguna dificultad con la autoridad temporal o eclesiástica, procurad presentaros a explicar la razón de vuestro proceder. La exposición personal de vuestras intenciones disminuye bastante y posiblemente desvanece el juicio que alguna mentalidad pudiera haberse formado de vosotros. (XVII, 270).
- BIEN
1. Ser bueno no consiste en no cometer ninguna falta, sino en saber enmendarse. (VI, 322).
2. Nuestra vida es tan fugaz, que apenas nos alcanza el tiempo para hacer el bien. (Mamá Margarita, I, 77).
3. El sacerdote para hacer mucho bien necesita unir a la caridad una fuerte dosis de amabilidad. (III, 49).
4. Para hacer el bien se necesita valor, estar dispuesto a sufrir cualquier mortificación, no hacer sufrir nunca a nadie, se siempre amable. (III, 52).
5. Siempre se debe preferir el bien general al particular. Nuestro beneficio particular no debe tomarse en cuenta cuando se trata del bien común. (XVII, 660).
6.La mejor manera de adquirir méritos consiste en hacer el bien sin mirar a quien, cada vez que esté a nuestro alcance, sin esperar recompensa del mundo, sino de Dios solamente. (VII, 418). 5
7. Nunca suprimas el bien para impedir un mal. (XI, 203).
- CARIDAD
1. No es justo que viva de la caridad de otros quien puede bastarse a sí mismo. (V, 754).
2. Sacrificaré todo para ganar el corazón de los jóvenes, a fin de poderlos regalar al Señor. (VII, 250).
3. No os recomiendo penitencias ni mortificaciones, pues, seréis dignos de mérito y gloria de la Congregación, si os soportáis unos a otros en las penas y disgustos de la vida, con cristiana resignación. (XVII, 267).
4. Viviendo sin preocupaciones, fácilmente se olvida uno del Señor. (VI, 329).
5. Quien protege a los huérfanos, será defendido por Dios en los peligros de la vida, y en la hora de la muerte María Santísima lo salvará. (XVIII, 864).
6. La manera más eficaz para obtener el perdón de los pecados y asegurarse la vida eterna, es proteger a los niños. (XIII, 247).
7. Yo os aseguro que quien no da lo superfluo, defrauda al Señor. (BAC, 738).
8. Demos bastante si queremos conseguir mucho. (BAC, 745).
9. Proteged a los pobres, si queréis llegar a ser ricos. (BAC, 749).
- CASTIDAD
1. Lo que debe distinguirnos de los demás, lo que debe ser la característica de nuestra Congregación es la virtud de la castidad. (XII, 224).
2. La castidad será el mejor triunfo de la Congregación y la forma más patente de agradecer a Dios tantos favores que nos ha concedido. (XII, 225).
3. Si alguno moralmente no está seguro de poder conservar la castidad, por caridad, no intente hacerse sacerdote ni religioso. (XI, 574).
4. Vino y castidad no pueden estar juntos. (IV, 184).
5. Humildad, obediencia, castidad, serán siempre agradables a María Santísima. (VIII, 131).
6. La virtud sobresaliente de los Salesianos debe ser la Castidad; así como los hijos de San Francisco de Asís se distinguen por su pobreza, y los hijos de San Ignacio sobresalen por la obediencia. (SM. 183).
7. Medios positivos para conservar la castidad: oración, evitar el ocio, frecuentar los Santos Sacramentos y ser cuidadoso en las cosas pequeñas. (IX, 708).
8. Medios negativos para conservar la castidad: huir de las ocasiones. (IX, 709).
- CEREMONIAS
1. Las ceremonias influyen para conservar es espíritu religioso. (XVII, 189).
2. El recogimiento religioso y devoto durante las ceremonias sagradas es de grandísima edificación para los fieles; además de que la santidad del acto lo requiere así. (XII, 61).
3. Las ceremonias bien hechas demuestran la seriedad y sensatez con que se debe proceder en el estado eclesiástico. (XII, 89).
- CIELO
1. Todo el bien que los demás hagan por nuestra sugerencia, acrecentará el esplendor de nuestra gloria en el cielo (XVII, 491).
2. Si el pensamiento del infierno es aterrador, que nos llene de consuelo la esperanza del Paraíso, en donde se gozan todos los bienes. (BAC. 675).
3. Si os juntáis con los buenos, os aseguro que iréis con ellos al Paraíso. Si con los malos, seréis desgraciados y acabaréis por perder irreparablemente vuestra alma. (BAC. 683).
4. El afecto hacia las cosas de la tierra, disminuye y ahoga el deseo por las cosas del cielo. (VIII, 774).
5. Caminad con los pies en la tierra, pero teniendo la mirada y el corazón en el cielo. (V, 544).
6. La llave y la cerradura que usaba Domingo Savio para entrar por el camino del cielo y cerrar la puerta al demonio, eran la obediencia y una gran confianza en el Director Espiritual. (V, 649)
7. El mundo está lleno de tontos y de astutos. Los astutos son los que trabajan y sufren para ganarse el cielo; los tontos son los que viven su vida sin pensar en la eternidad. (VIII, 19-20).